50-años de edad, Asha Zulu Mandela comenzó a crecer sus hermosas trenzas hace 25 años, después de mudarse de Trinidad y Tobago a Nueva York. Hoy es conocida como "la Rapunzel Negra" y tiene el récord de esclusas más grandes del mundo, que miden 19 pies, 6 pulgadas de largo.
Poco después se instaló en Brooklyn, New York, Asha Mandela comenzó a trabajar como niñera, pasando la mayor parte de su tiempo en los parques y zonas de juegos. Arreglar y peinar el pelo simplemente no estaba funcionando muy bien con su apretada agenda, por lo que decidió ir a dar una alternativa más fácil, más natural. Después de una cuidadosa consideración que comenzó a crecer. Ni siquiera Asha ella estaba segura de que había tomado la decisión correcta, porque el pelo corto hace que se vean de punta. Pero a medida que crecían, se enamoró con su nuevo peinado y hasta comenzó refiriéndose a su pelo como "mi bebé". Los años pasaron y sus dreadlocks crecieron pasando la longitud del piso, pero ella no se dio cuenta del singular peinado natural, se había convertido hasta hace unos 5 años cuando la gente comenzó felicitándola y hacer todo tipo de preguntas, como cuánto tiempo había estado creciendo las trenzas, el tiempo que tomó para lavarlo y si ella se presentó en el Libro de los Récord Guinness. Esto último despertó su interés, por lo que se acercó a Guinness y Ripley es hacerla oficial de registro.
Después de seguir las estrictas reglas impuestas por Guinness y con su cabellera examinadas por dos profesionales de cuidado del cabello que se aseguró de que no tenía extensiones, Asha estableció un nuevo récord para las trenzas más largas del mundo, que mide 8 pies, 6 pulgadas. La longitud de su pelo era nada menos que impresionante, pero como resulta que las medidas oficiales no eran ni la mitad de bien. Poco después de su registro fue reconocido por Guinness, Mandela recordó que desde hace más de una década que había sido anudando sus trenzas para evitar roturas. Ocho años después de que ella comenzó a crecer su cabellera, Asha tuvo una serie de problemas médicos, incluyendo 13 cirugías, dos ataques al corazón leves y dos golpes leves, por lo que ella pasó los siguientes 14 años dentro y fuera de los hospitales. Su pelo, que ya había superado la longitud del piso se había convertido en un cabello delicado y muy frágil. Incapaz de seguir las sugerencias de su familia y amigos para cortarla, la mujer comenzó a anudar sus cabellos para que sean manejables. by:_ibtimes
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